domingo, 3 de abril de 2011

HOSPITAL ¿NUESTRA SEÑORA DE QUE, Y DE QUIEN?

La conservadora y sacrosanta derecha española no ceja en su empeño de imponernos hasta en la sopa su presencia y su concepción de la vida.

Tod@s sabemos que en Extremadura se utiliza el nombre de personalidades para legitimar que el culto religioso interfiera con las celebraciones oficiales o que las divisiones civiles coincidan con las religiosas.

En Cáceres estos días se ha planteado que se mantenga la costumbre franquista de poner nombre religioso a los hospitales respecto al nuevo hospital.
La Asociación Cáceres Laica-Extremadura Laica, no entiende ni acepta que un hospital de su ciudad se dedique a personajes de la mitología cristiana, ni a personas “relevantes” de la iglesia católica. Cáceres Laica defiende la aconfesionalidad del Estado español y la laicidad de sus instituciones.
Dedicar un hospital a un personaje mítico religioso (católico), es un homenaje de reconocimiento público a una de las instituciones peor (sino la peor) valoradas socialmente. Por si esto no fuera poco Cáceres ya dispone de dos hospitales públicos con nombres en clave religiosa: N. S. de la Montaña y S. Pedro de Alcántara, muestras más que suficiente. No podemos olvidar que estamos en 2011, ya no son tiempos para seguir honrando a la superprivilegiada iglesia católica. Esos tiempos deberían pasar, definitivamente, a la historia.
Y la historia no es otra que acabada la Guerra Civil, los vencedores ajustaron cuentas con los vencidos, recordándoles durante casi cuatro décadas quiénes eran los patriotas y dónde estaban los traidores. Calles, plazas, colegios y hospitales de cientos de pueblos y ciudades llevaron desde entonces los nombres de golpistas, fascistas y de todo el santoral y mitología cristiana, obviamente con acto de bendición de la santa iglesia católica apostólica y romana (SICAR). Que cuando Franco murió, en noviembre de 1975, era difícil encontrar una localidad que no conservara símbolos de su victoria, de su dominio y de su matrimonio con la Iglesia católica. No debemos seguir contribuyendo con este despropósito, es más tenemos que “rebautizar” en clave laica, por higiene democrática.
La Asociación Cáceres Laica-Extremadura Laica, ante los rumores que le están llegando sobre el futuro nombre que se le pondrá al nuevo hospital de Cáceres (Hospital N. S. de la Montaña), desea que no se caiga en el tremendo error  de seguir en la línea de los “vencedores” poniendo un nombre religioso a dicho hospital. Ya está bien que todo lo civil tenga que estar en clave religiosa en esta ciudad.
Desde Cáceres Laica creemos que nuestra Alcaldesa, su Gobierno y el conjunto del Ayuntamiento deberían eliminar ciertos artículos de su Reglamento de Protocolo, abstenerse de asistir a misas y procesiones católicas como Corporación, retirar de los espacios públicos los símbolos religiosos, particularmente el crucifijo del salón de Plenos, y dedicar nuestras calles, plazas, jardines, centros públicos,... a personas e instituciones que tod@s podamos honrar.
Las Asociación Cáceres Laica-Extremadura Laica insta a nuestra Alcaldesa, su Gobierno y el conjunto del Ayuntamiento a asumir este compromiso respetando y cumpliendo el artículo 16.3 de nuestra Constitución, que declara la aconfesionalidad del Estado.