Reflexión del presidente de
Europa Laica*
Con una mayoría parlamentaria y
una judicatura mayoritariamente confesional, el avance hacia la laicidad del
Estado se “estanca”, a pesar de tener una sociedad altamente secularizada.
La ideología católica de una mayoría
de los jueces que, en la actualidad, forman parte del Tribunal Supremo, junto a
la pasividad del poder legislativo y, lo que es más grave, del legado que
dejaron los gobiernos
“progresistas” de González y
Zapatero, en materia religiosa y de libertad de conciencia, son la causa
principal de que el poder judicial
favorezca los intereses de la iglesia católica, en la mayoría de sus
sentencias.
Es intolerable que unas recientes
sentencias de Tribunal Supremo (TS)